El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha acusado a la plataforma de capital chino TikTok de intentar desatar una guerra civil en el país. Según Maduro, la red social está dividiendo a la población e incitando a la violencia a través de sus contenidos. El mandatario aseguró que TikTok está exacerbando las tensiones sociales y alimentando el conflicto interno.
En respuesta a las preocupaciones del gobierno, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela emitió una sentencia en la que impone una multa de 10 millones de dólares a los propietarios de TikTok. La multa se debe a la falta de medidas adecuadas para prevenir los retos virales, que, según las autoridades, habrían provocado la reciente muerte de tres niños en el país.
Esta nueva controversia se suma a la creciente atención que el gobierno de Maduro está poniendo en las plataformas digitales, acusándolas de contribuir a la desestabilización y el caos en Venezuela.